El referente de Libres del Sur Jesús Escobar cargó con dureza contra la Justicia y reiteró que los allanamientos de julio que derivaron en la detención de dirigentes sociales fue un show mediático con un objetivo claro: perseguir a las organizaciones sociales, silenciar a la oposición y causar miedo. También lanzó munición gruesa contra el ministro de Trabajo y Desarrollo Laboral, Lucas Castelli, y contra el fiscal Pablo Vignaroli, a quienes definió como “funcionales” de poder de turno “con fines netamente personales”.

“Este paso es el principio para desenmascarar esta causa armada e impulsada por un ministro, orquestada por un fiscal y que, de alguna manera, nos retrotrae 20 años atrás cuando se utilizaba a la Justicia o al Poder Judicial con objetivos políticos”, expresó Escobar, en diálogo con Todo el mundo sabe, al explicar las cuatro denuncias que Libres del Sur presentó ayer por violencia institucional. Dijo que se hizo una por cada dirigenta detenida y trasladada a la Comisaría Primera y detalló que en ningún caso “hay argumentos, razones o palabras que las involucre en algo”. Si bien dijo que transcurrido casi dos meses de aquel episodio “no hay nada contra Libres del Sur”, aclaró que “el daño ya está hecho”. Eso, según él, fue lo que se buscó con esta maniobra, siguiendo la lógica que impartió el presidente Javier Milei a nivel nacional de perseguir a las organizaciones sociales.

“Acá, claramente, se busca perseguir y criminalizar a la oposición; se busca erosionar la democracia; están buscando meter miedo y armaron una causa”, destacó y señaló a Castelli como uno de los máximos responsables de estos embates contra las organizaciones sociales, que van más allá de Libres del Sur. “Cuando empezamos a juntar papeles, nos encontramos con que, a principios de año, el ministro Castelli en una reunión con Mercedes Lamarca y Gladys Aballay, les dijo ‘no voy a parar hasta hacer cagar a las organizaciones sociales opositoras porque quiero armar mí fuerza política y los recursos los voy a manejar yo’”.

Los allanamientos denunciados se llevaron adelante durante un megaoperativo policial el 12 de julio, en los que en total diez mujeres de Libres del Sur y del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) fueron detenidas en el marco de una investigación por presunto fraude a la administración pública.